Día 1.156 (13/1/13): El milagro

Posición 03º 25′ Sur, 147º 45′ Este, 160 millas al Noreste de Madang y a 70 millas del islote más cercano, en pleno mar abierto, aproximadamente 19:00 horas locales.

Durante todo el día tuvimos buen viento, el Bahari volaba sobre las olas manteniendo una velocidad constante de entorno a 9 nudos, navegábamos con mayor rizada y génova desplegada al 80%, altura de ola moderada, unos 2 metros, una buena singladura.

El sol se había puesto hacía rato, aunque todavía no era noche cerrada, la penumbra dejaba entrever el blanco espumoso de las crestas de las olas.

Mientras preparaba la cena tuve una intuición y una sensación extraña, un impulso me llevó a dejarlo todo y acudir inmediatamente a la mesa de cartas. La pantalla del radar estaba despejada, la del ordenador de navegación estaba en orden, rumbo correcto y muy lejos de cualquier tierra, sin embargo hice zoom en la cartografía, no sé porque, cuando navegamos en travesía de aguas profundas no tiene sentido el detalle, la cartografía está a una escala mayor para tener visión general, y si hay algún obstáculo está indicado, cuando te acercas a él ya amplias.

Cuando llegué a la máxima resolución no me lo podía creer, ¡estábamos sobre unos arrecifes!, allí, en medio de la nada, y ninguna indicación en niveles inferiores de zoom, ¿pero cómo podía ser?

Miré la sonda y todavía no marcaba, es decir, todavía teníamos bastante agua bajo la quilla, por una vez me alegré de que la carta estuviera mal, de otro modo ya estaríamos encallados.

De un salto salí a cubierta y grité a Jose Carlos que estaba allí: ¡tenemos que virar en redondo ya, estamos sobre unos arrecifes! Se llevó un susto de muerte, pero no hizo preguntas, conectamos motor y viramos tan rápido como pudimos.

En ese momento, entre sombras, pude ver la rompiente, ¡Dios! ¡Estábamos a menos de 50 metros! Unos segundos más y habríamos embarrancado, el impacto hubiera sido brutal, 10 toneladas a 9 nudos de velocidad sobre unas rocas a ras de agua, ninguna posibilidad de no acabar hecho añicos, la catástrofe total, el final…

Incluso nuestro rescate personal habría sido dudoso, en medio del mar, tan lejos de costa, en Papúa Nueva Guinea, tras nuestra experiencia de haber lanzado un mayday en Fiji y no haber obtenido ayuda soy bastante escéptico del salvamento en ciertos países, tal vez si algún mercante nos hubiera oído tendríamos alguna posibilidad.

Habíamos conseguido evitar estrellarnos, pero ahora nos quedaba el siguiente desafío, la carta estaba claro que era errónea, pero no sabíamos hacia donde ni cuanto estaba desplazada, y el arrecife existía, porque habíamos visto la rompiente, ¿Cómo conseguíamos no meternos en él nosotros solitos?

Lo único que se nos ocurrió fue arriar todas las velas, reducir la velocidad al mínimo y volver exactamente por la misma traza que habíamos llegado (en sentido opuesto), la noche ya se había cerrado y no se veía nada a más de una decena de metros.

Con el corazón en un puño por lo que había pasado y lo que podía pasar, nos alejamos poco a poco, desgastando la vista tratando de detectar una rompiente en la oscuridad, agudizando los sentidos para escuchar o incluso oler lo que fuera, nos llevó horas hasta que dimos un rodeo de más de 5 millas al punto de contacto con el arrecife y pudimos reemprender una navegación normal.

Esta vez estuvo muy cerca, por segundos, ha sido un milagro que en el último momento pudiéramos evitar un desastre sin remedio.

Para mí se abre ahora un tema de reflexión, sin dramatismos ni exageraciones, porque bien está lo que bien acaba, pero hay cosas sobre las que conviene meditar.

Por un lado el de la tecnología, jamás había visto un error de este tipo, y eso que ya sabéis que he visto muchos. Siendo yo tecnólogo es casi irónico que diga esto, pero no se puede confiar en ella a pies juntillas, hay que ser muy crítico y analizar todos los aspectos en los que puede fallar, estando claro que es una inestimable ayuda a la navegación y la seguridad, y que sin ella posiblemente no habríamos llegado hasta aquí.

Por otro sobre aspectos mucho más internos y profundos, mi base es más bien racional y escéptica, pero mi mentalidad es abierta y creo que no todo es explicable con la lógica, de otro modo ¿Por qué tuve esa sensación, dejé de cocinar y me fui a ver la carta en ese momento? No era lo más oportuno, ¿Por qué amplié la carta al máximo? Cuando es algo que nunca hago estando en mar abierto y sin indicaciones de obstáculo o peligro, ¿Por qué a segundos de impactar y con el tiempo justo de reaccionar? Estadísticamente es altamente improbable que sea una coincidencia, por ejemplo es algo que no había hecho durante días y días de navegación (puede salir una probabilidad entre millones). Supongo que cada uno podrá interpretarlo de un modo u otro, yo tengo la mía, no es la primera vez que me suceden cosas así.

Hay instantes que pueden cambiar tu vida para siempre, y no sabemos porque la balanza se decanta a un lado u otro, en este caso la intuición y la percepción triunfó sobre la razón y fue el camino correcto, tal vez hay un instinto que se desarrolla cuando vives rodeado de permanente riesgo, tal vez hay otras cosas más difícilmente explicables, sea como sea, asumo lo sucedido, lo valoro como lo que es y sencillamente doy gracias.

Hasta ahora pensaba que mis regalos de reyes habían sido las experiencias en Hermit y Ninigo, anoche me hicieron dos regalos más: un barco y posiblemente una vida…

Sed felices

Kike

PD: para los que creen en los números, fijaos que era 13-1-13, capicúa y con dos 13, yo es algo en lo que no creo mucho, pero ahí lanzo el tema…

13 Comments

  • COMO QUIEN DICE FUE LA MANO DE DIOS QUE QUE HIZO VER LA CARTA.POR QUE PASAN LAS COSAS???TODOS TENEMOS UN ANGEL GUARDIAN!!O ESE SEXTO SENTIDO QUE NOS HACE VER LAS COSAS MAS ALLA DE NUESTRA VISTA OIDO U OLFATO!!!
    FUERARA DE TODO EXELENTE ESTE RELATO !!YA PODRIA SER PARTE DE UN LIBRO MUCHA SUERTE!!!

  • Lo unico que te puedo decir, es que tienes la protección especial de alguien muy querido y me alegro de ese pronto que te hizo dejar tu quehacer para mirar la pantalla (maravilloso). Me alegro de que esteis bien y procurad olvidar lo pasado y con buen viento mirad adelante. Un abrazo.

  • Bueno,buenoo,buenooooo!!!!!! entre escondido en la tormenta y por los pelos de un calvo.yo diria que eres Cool MCCool, tu amas el peligro..jajajajajajjajaja y lo mejor,es que ya estàs vacunado.yo solo de leerlo se me ponen los pelos como escarpias,creo que no voy a navegar nunca màs..en cuanto al nùmero trece,para los griegos es el de la suerte y cuando nace un niño se le regala un broche con ese nùmero.Pero bueno yo creo màs en los instintos y las intuiciones,naces con ellas y dependiendo del entorno y las circunstancias pueden ser un modo de supervivencia pues desarrollas como un sexto sentido y pocas veces falla…pero a parte de esto y de algùn que otro sobresalto..se que todo va por buen camino,!!! mucha suerte !!!! un abrazo.

  • hay que creer en un Dios!! no te olvides nunca que algo hay ahi seguro seguro!! Me alegro millones x vosotros cracks!! Ah y feliz año nuevo monstruos!! Dile a Jose Carlos que la segunda niña ya ha llegado…en mi caso el 12-12-12!! brutal!!

  • en el comentario que te deje el dia anterior, decia que habia sido un milagro lo del mercante, pero el verdadero y autentico milagro es este que has narrado, y como tu dices no tiene ninguna explicacion logica ó racional, asi que una vez mas tu angel de la guarda esta ahi contigo , vigilante, para daros su proteccion.

  • Intuición, sexto sentido y algo más que os acompaña. Me alegro del final del capítulo. Enhorabuena por haberos sobrepuesto, una vez más, a las circunstancias. Cuidaos. Un abrazo.

  • Paaa kikee !!! .. La verdad que me dejas de gancho con lo sucedido, pero a la vez sumamente contento y tranquilo de como zafaron. Sea cual sea el motivo de tu intución, es bueno saber que aveces por razones inexplicables las cosas suceden.
    Tal vez la razòn se remonte a los origines mismos del universo, pues todo lo que conocemos, parte de la misma particula, y situaciones como esa creo yo que dan evidencia de la cercania que existe entre nosotros y el medio que nos rodea.

    Abrazo grande, y la mejor para ustedes. !!!!
    Seba

  • Kikeee… los milagros no existen, creo que llevais demasiado en el mar….
    Creo que si hubieses tenido una sensación extraña en cualquier otro momento y hubieses revisado mapas, y resto de cosas sin ver obstaculos , no lo habrias considerado como sensación extraña, (al no haber detectado nada), no habrias escrito ningún post, y posiblemente habrias olvidado por completo aquella sensación extraña que tuviste.
    Por otro lado yo revisaria vuestro proceso de navegación ¿El mapa no tiene alarma? ¿El mapa no tiene alguna alarma si detecta obstaculos sin hacer zoom? Igual teneis que dejar siempre el mapa a máximo zoom, o tener dos mapas… pero me parece muy chungo que o tengais que estar siempre mirando o tener intuiciones…
    En todo caso me alegro que todo vaya bien!!!!

  • Estoy totalmente de acuerdo con Escéptico!
    No tener mapas de papel y solamente mapas electrónicas me parece peligroso, pero yo soy del edad de los dinosaurios. Han tenido mucha suerte. Soy muy feliz que han sobrevivido un potencial accidente.
    Muy fuerte abrazo,
    Francis

  • Para mi…fué tu angel guardián que tocó tu hombro y te susurró el peligro inminente.

    Que sigan con bien,disfrutando de esa super aventura de vida.

  • Eso fue en verdad un MILAGRO.

    En Google Earth aparece una formación tipo atolón en esa coordenada. Tiene aproximadamente 12×5 Km. Mayor Susto!!! Efectivamente una situación catastrófica.

    Yo solía ser escéptico e incluso ateo hasta que la vida me acercó a Dios y desde entonces veo las cosas de un modo diferente y quizá más feliz. Dios los ha acompañado en este viaje maravilloso que ustedes están haciendo. Daré gracias a El por ustedes y le pediré que siempre los acompañe.

    Gracias!

Leave a Reply to mercedes Cancel Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.