Día 346 (26/10/2010): Por si se nos había olvidado…

El viento, en su infinita sabiduría, ha tenido a bien que repasáramos hoy el concepto de ceñida (navegar en contra de su dirección), por si se nos había olvidado tras estas semanas de escala en Río de Janeiro.

Mi despertar no ha sido muy agradable, estaba en lo mejor del sueño, en esos minutos previos a mi guardia de las 8 de la mañana, teniendo en cuenta que me había acostado a las 4 (seguimos haciendo turnos de 4 horas), y me ha despertado el sonido de la carraca de la caña de pescar, habían picado. Por la fuerza con la que tiraba debía ser algo muy grande, así que he salido a la carrera a cubierta sin vestir y preparado para sacarlo, con las ganas que tenemos de pescado fresco no queríamos que se escapara. Jose Carlos ya había parado el barco y estaba tratando de frenarlo, hasta que de repente un golpe seco y el cese del ruido nos ha anunciado que la línea había partido, supongo que también está un poco pasada de tanto sol, agua salada y uso, tendremos que cambiarla en nuestra próxima escala.

En ese momento he mirado a mi alrededor y me he dado cuenta que la situación meteorológica había cambiado por completo, el cielo estaba completamente cubierto de un gris plomizo, el viento había subido y se nos había ido a la proa y las olas incrementado su tamaño. Los rociones empezaban a salpicar y el barco a pantoquear (dar golpes con la proa al caer tras una ola).

Ya no me ha dado tiempo a acostarme, así que me he abrigado y he iniciado mi guardia. La situación se ha ido tornando más dura, hasta el punto que no hemos podido aguantar el rumbo, los golpes eran demasiado violentos y apenas avanzábamos, así que hemos tenido que variarlo unos grados a estribor, hacia tierra, y empezar a ceñir con un rizo puesto.

Desde luego en este viaje creo que vamos a batir el record mundial de ceñida, calculo que llevaremos como 6.000 millas navegando de este modo, varias veces la proeza del navegante que cruzó el Atlántico en contra de los Alisios y escribió un libro al respecto. En cualquier caso tampoco es un drama, es incómodo y ya está, sobre todo cuando dura mucho tiempo, pero vamos, esta es de las soportables, las hemos tenido muchísimo peores.

Cuando ciñes, como vas contra las olas, el barco da continuos golpes en el sentido longitudinal y también se mueve bruscamente en el lateral (puesto que las olas no llegan exactamente de frente, llevamos un cierto ángulo con respecto a ellas), el agua salpica al impactar contra el barco, mojando permanentemente la cubierta (y a ti si estas en ella), por mucho cuidado que tengas la humedad acaba calando cada rincón del interior, es como ir montado en una atracción de feria, a corto plazo resulta divertido, pero hacer cualquier cosa se complica.

Por lo demás tampoco hemos tenido más incidentes (afortunadamente), vida rutinaria en navegación larga, alternando el control del barco en las guardias, con el descanso, la lectura y el relax entre las mismas.

Lo mejor del día la puesta de sol, impresionante, un globo de color rojo vivo intenso que poco a poco iba siendo engullido por las olas en el horizonte, todo ello con el contraste de los colores oscuros de cielo y mar, un auténtico espectáculo que nos ha brindado la naturaleza.

Nuestro ritmo ha bajado un poco como consecuencia de la situación, navegamos a 5,5 nudos a rumbo 240º, nuestra posición a las 21:30 GMT es 25º59’S, 046º35’W, casi a la altura de Sao Francisco do Sul, aunque a unas 100 millas de distancia. Todavía nos quedan por recorrer más de 150 millas hasta el sur de la Isla de Santa Catalina, seguimos pensado que llegaremos allí mañana por la noche, aunque no creo que nos adentremos sin luz del sol, puesto que es muy complicado como consecuencia de la escasa profundidad y los canales sin balizar que hay que seguir.

Mañana más.

Sed felices.

Kike

6 Comments

  • Estais otra vez a pleno rendimiento y en vuestra salsa, me alegro de que navegueis de nuevo y pensad que las ciudades son para visitarlas o para aposentarse en ellas yvuestro destino es seguir navegando. Ese pez que se escapó, tenia que ser grande, aparte de la rotura de la linea.
    Que tengais buen viento y un fuerte abrazo.

  • Primo, me da la sensacion que despues de estar un tiempo con mar en calma , en el fondo , os apetece un poco de movida, de vez en cuando.
    NOTA: Lo de la movida no lo he dicho en relacion al hecho de «haberte acostado a las 4»

  • decirle al señor «MORRAL» que pare de agobiar. El finde pasado traje un Barco desde Alicante con luna llena y 6 nuditos de aleta que lo hicieron una gozada. Hacer el ritual del «MORRAL» y vereis como cambian las cosas!! Un abrazo Terry!!

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.