Día 157 (20/04/2010): Kuna Yala

O lo que es lo mismo, Nación Kuna, así denominan a su tierra los nativos. Como habréis podido observar en el posicionador satélite, ya hemos llegado, hacia las 12 hora local (GMT-5) estábamos fondeando en Isla Porvenir, centro administrativo del archipiélago y donde se pueden realizar los trámites de entrada en el país, así como obtener el permiso de navegación preceptivo para estas aguas y el Zarpe (equivalente a despacho de salida) necesario para nuestro siguiente destino.

La noche se ha portado bastante bien con nosotros, nos ha permitido apagar el motor dos veces por espacio de unas dos horas, en el momento el viento subía a una intensidad razonable (8-9 nudos para nosotros), el resto del tiempo hemos navegado a motor y vela con medias de velocidad aceptables, por encima de los 6 nudos, poco para este barco, pero muy decente para las condiciones y las pocas revoluciones a las que llevábamos el motor para no consumir en exceso. A medida que nos íbamos acercando la corriente nos empujaba favorablemente con fuerza, dándonos hasta 2 nudos.

Como en la noche anterior, el tráfico de mercantes ha sido una constante, ninguno de ellos se ha acercado en exceso, pero como os dije, nunca nos confiamos con ellos.

La mañana ha empezado activa para mi, nada más empezar mi guardia de las 8 de la mañana una picada de atún, de unos 8 kg, una especie que no había visto nunca, lomo amarillo y unas aletas pectorales enormes. Inmediatamente me he puesto a limpiarlo y prepararlo. Como sabéis, normalmente en cuanto pescamos una pieza recogemos la caña, hay que tomar del mar únicamente lo que uno necesita y razonablemente se va a comer antes de que se ponga malo, en este caso la he vuelto a echar, dadas las posibles dificultades de aprovisionamiento en San Blas no nos vendría mal congelar algo de pescado por si acaso. No había acabado de limpiar el primero y ya estaba sonando la caña otra vez, un ejemplar idéntico, hasta en tamaño, desde luego se han empeñado en no dejarme desayunar tranquilo, media mañana limpiando pescado. Supongo que hemos atravesado un banco, si no llego a recoger el cebo y empezamos a hacer pasadas por la zona estoy seguro de que llenamos el barco de atunes. En cualquier caso, según estaba previsto uno ha ido a la nevera y el otro al congelador. De sabor es excelente, lo hemos comido a mediodía, de carne más rosácea y menos roja que otros atunes que hemos pescado, pero muy suave, exquisito a la plancha vuelta y vuelta, aunque supongo que el sashimi estará un poco más soso.

La entrada en el fondeadero de la Isla del Porvenir ha sido complicada hasta que nos hemos aclarado y sencilla de realizar. Esta zona está muy pobremente cartografiada, de hecho hay una amplia zona que carece de ella, y además existe un error de casi 0,1 milla entre las cartas y la posición GPS, por ello todas las lecturas que hemos encontrado de la zona recomiendan fiarse de la información visual y no de la cartografiada. Como ya llevábamos esto en mente no confiábamos en los datos que nos indicaba el plotter ni el ordenador de navegación, y por observación directa no ha sido evidente averiguar el paso hacia el fondeadero evitando los arrecifes que hay por todos lados. Una vez lo hemos visto hay profundidad de sobra, de hecho hemos tirado el hierro como a 12-14 metros y tenemos 18 metros de agua bajo el casco.

El paisaje de San Blas a medida que te acercas es espectacular, salpicado de diminutas islitas por doquier, todas ellas con sus palmeras, sus playas blancas y aguas de distintas tonalidades en función de la profundidad. Parece una escena de foto de las típicas revistas de viajes, aquí es una realidad por observación directa.

Porvenir es una isla muy pequeña, no tendrá ni 500 metros en su zona más alargada. Sobre ella 4 ó 5 edificios bajos, la misma cantidad de chozas hechas con cañizo y una pista de aterrizaje que ya veréis en las fotos. Sabía que San Blas tenía aeropuerto y que estaba aquí, tal vez por eso imaginaba algún servicio más, una isla con aeropuerto tiene que tener de todo, pensaba yo, craso error…

El «aeropuerto» es un matorral sobre el que han puesto algunas losas de hormigón, sin protección ni mantenimiento de ningún tipo, y con una torre de control que es una chabola medio derruida, no creo que aterricen ahí más que avionetas, y pequeñas…

El resto de la isla lo ocupan los cocoteros y arena, dando lugar a un paisaje muy peculiar. Dos de los edificios los ocupan las autoridades, inmigración, policía, capitanía de puerto y consejo Kuna. Los trámites no han sido muy complejos y nos han atendido con amabilidad y simpatía, independientemente de que los pagas. Se me ha ocurrido preguntar por internet, por si las moscas, la respuesta: «ah! si! creo que hay una isla que tiene internet, pero tengo que llamar para confirmar», total que ha llamado y parece que en una de las islas si hay un acceso en unas cabañas que supongo serán para turistas, solo hay un pequeño problema, la isla no sale en los mapas (se llama isla elefante) y no sabemos si podremos llegar con el barco, me ha señalado más o menos por donde está sobre un mapa sin referencias de latitud y longitud, y yo me he hecho un esquema para orientarme, ya veremos si lo puedo conseguir. También hemos preguntado por gasoil y comida, nos han indicado que en el islote de al lado, Wichubhuala, a unos 500 metros al suroeste.

Tras comer hemos ido para allá, la escena que contemplábamos por el camino era digna de un documental televisivo. Wichubhuala, a pesar de ser más pequeña que Porvenir está completamente cubierta por chozas hechas totalmente de cañizo, tipo ciudad con sus calles, eso sí, de arena. Algunas de ellas están construidas sobre el agua con troncos que hacen de pilares aprovechando la poca profundidad del agua que la rodea. Si Porvenir es el centro administrativo Wichubhuala es el centro urbano, dotada de colegio, centro médico e iglesia, tendríais que verlas, todo realmente al estilo nativo. Hay un cierto tráfico de cayucos que van y vienen de la isla, muchos de ellos a remo, los más evolucionados con motores fueraborda. Las mujeres todas visten al estilo tradicional, con sus faldas y blusas de colores vivos y sus abalorios en antebrazos y piernas, los hombres si usan ropa al estilo occidental, aunque muy rudimentaria, en general todo el mundo va medio desnudo y descalzo. Mientras bordeábamos la isla con la auxiliar hemos visto un cartel de venta de combustible en una casa flotante, se veían abarloadas un par de canoas kuna, nos hemos acercado y tras preguntar precio y comprobar la calidad hemos llegado a un acuerdo. Mientras Jose Carlos llenaba los bidones yo he hecho buena amistad con un grupo de niños, simpáticos y vivarachos, escasos de estatura y con los rasgos característicos indios, la sonrisa no se ha borrado de su cara ni un segundo, los pequeños no hablaban Español, solo kuna, aunque todos me entendían, les encantaba que les hiciera fotos y luego verse en ellas, así que llevo una buena cantidad para el recuerdo. A la hora de la despedida querían venirse conmigo a dar la vuelta al mundo y luego a mi casa, que atrevida es la inocencia.

Hemos continuado bordeando la isla para buscar el supermercado, hasta llegar a un pequeño embarcadero, por el movimiento de canoas hemos deducido que era allí. ¿Supermercado? mucho decir, una choza oscura y mugrienta dotada de 4 latas, algunos alimentos básicos y algo de fruta y verdura semi podrida (tampoco se de que me extraño viendo el entorno). ¿Y aquí es donde vienen a comprar las cosas ellos? Me he preguntado, con razón decían que es un lugar de complicado abastecimiento, no hay de nada y lo que hay de pésima calidad. Hemos acabado comprando 2 zanahorias, 2 pepinos, 1 sandia y 1 piña, lo único que se salvaba, creo que vamos a estar durante algunos días comiendo pescado y organizándonos con lo que tenemos en el barco. Luego he preguntado por pan, con el dedo me han señalado al panadero, tranquilamente tomando una cerveza en el embarcadero. Cuando ha acabado nos ha llevado a su casa y nos ha enseñado unos panecillos que no tenían mala pinta, así que los hemos comprado.

De vuelta a la auxiliar hemos recorrido las calles entre las chozas, si esto es lo más civilizado, la capital de la región, está claro que lo que dicen es cierto, esta gente vive casi del mismo modo que lo haría hace centenares de años.

Sobre la pregunta que me hacia ayer la respuesta es evidente, viven como les apetece vivir, son fieles a sus costumbres porque mantienen una serie de valores y un amor a sus recursos naturales no compatibles con el desarrollo y la presión económica, la gente es pausada y tranquila, nunca falta una sonrisa en su boca y os aseguro que los niños con los que estuve no serian más felices con una videoconsola, 3 horas de televisión y viendo a sus padres un par de horas al día.

No me quiero extender más por hoy, ya os seguiré contando más cosas de esta tierra (por decir algo, más bien es casi todo agua) de la que creo que se puede aprender mucho.

Sed felices.

Kike

8 Comments

  • Todo muy descriptivo, Kike. Espero que el volcán islandés no nos arruine el viaje de dentro de 3 semanas. Ya te habrás enterado que el tráfico aéreo en Europa ha estado colapsado una semana y que ahora se está restableciendo poco a poco. Si tiene que erupcionar de nuevo, que lo haga cuando ya estemos allí.

  • Vamos a ver, si la unica isla que tiene conexion a internet, no viene en los mapas ¿como es que se llama isla elefante? si se supone que tiene que ser diminuta para no aparecer. En fin supongo que ya averiguaras por que motivo le pusieron ese nombre (esperemos que no sea por «las trompas» de sus habitantes….).
    NOTA: Una vez dejado este comentario de hoy , me voy… ¡¡¡PÁ LA FERIA!!!!! de Sevilla!!!

  • Enrrique como tu dices , esa gente a su manera es feliz pero subsistiendo de lo que la tierra(que por lo que tu dices, es poca) y el mar les da, que es como han vivido siempre y sin otras aspiraciones. Respecto a la dieta «oceanica» tendre que aprenderla y aplicarla pues me sobran kilos y por lo que respecta a vosotros si estais fuertes es lo principal. Espero que José Carlos esté recuperado del todo.Un Fuerte abrazo.

  • Hola Chicos, estamos en El Saler con Lady y Julian y siempre al loro de vuestras andanzas. Aqui no se habla de otra cosa. Julian se pone al aparato: La envidia nos corroe el intelecto, lo unico que nos consuela es que tenemos todo el mundo por conocer y tu ya no tendras mas remedio que apuntarte al apolo XXX. Nos veremos en Nueva Zelanda. Besos

  • UN BESO FUERTE, DESDE LEBRIJA, QUE NO TE OLVIDES NUNCA QUE POR AQUÍ SE TE QUIERE UN MONTÓN. Y PARA CUANDO VENGAS, YA QUE TENEMOS RECURSOS, MUCHOS RECURSOS PARA SUBSISTIR Y SOBRE TODO PARA COMER BIEN, REPITO PARA CUANDO VENGAIS OS TENDREMOS PREPARADA UNA GRAN COMILONA, COMO TU SABES QUE PREPARAMOS LOS ROMERO POR ESTAS TIERRAS DE DIOS, ASÍ QUE NO TE PREOCUPES SI PASAS ALGO DE HAMBRE, YA COMERÁS CUANDO VENGAS…JAJAJAJAJAJAJA, ES BROMA EH LO DE QUE PASES HAMBRE, QUEREMOS QUE COMAS MUCHO Y ESTEIS MUY FUERTES.

    MUUUUUUUUUUUUCHOOOOOOOOOOOOOS BESOOOOOOOOOOOOOOOOOSSSSSS¡¡¡¡¡¡¡

  • Increible!!!! por esos lugares no hay ni tiendas y por aqui nos abren otro centro comercial, que no digo el nombre por no hacerle publicidad gratis, bueno todo sea por crear puestos de trabajo, que falta hace.
    Cuidaros mucho.

  • yo estuve alli cuando mi mujer estuvo trabajando en Panama,fui a recojerla desde España,y luego fuimos a Peru,estuve en kuna yala,San Blas,en un pueblecito que se llamaba Playon chico,la islita era yandup island,y alli mismo,rodeados de la cultura Kuna,q me encanto,encargamos a la pequeña Paula.
    los Kuna son gente muy sencilla autogestionados por su consejo Kuna,con leyes sencillas y facilmente entendibles,viven totalmente al dia y anclados en sus costumbres,toman lo que necesitan el medio y son un claro ejemplo de como se debe gestionar lo sostenible y si kike tienes razon,no me creo que sean menos felices que el ultimo de los europeos.

    sempre endavant!!

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